Cimentaciones

Cómo saber cuándo hay problemas en el terreno

Aunque mucha gente no lo crea, siempre damos de lado este tipo de problemas puesto que no suelen ser muy visibles pero lo cierto es que cuando existen complicaciones reales en la cimentación de un edificio estas se manifiestan de forma clara en cuestión de meses o años.

Las alarmas saltan cuando se manifiestan los primeros signos, suelen ser en forma de fisuras, grietas muy pronunciadas, zonas pandeadas en la propia fabrica del ladrillo o humedades muy severas en los bajos del terreno. Por ello, siempre es recomendable realizar un pequeño seguimiento del estado de estas áreas.

El no seguir estas recomendaciones puede producir que en un futuro haya desprendimientos de voladizos, ladrillos que puedan ocasionar daños irreversibles en cualquier vecino o viandante del barrio, llevando consigo las graves consecuencias de no haber tomado ciertas decisiones técnicas a tiempo.

Cómo detectamos los problemas

Nuestro equipo especializado cuenta con camión laboratorio y herramientas clave para la detección de estas anomalías, siendo la principal de ellas la llamada “tomografía”.

Nuestra manera de actuar en estos casos es realizando primero toda una exploración completa del edifico en búsqueda de pistas. Una vez hemos hecho esta toma de información, se procederá a realizar un estudio geotécnico por geólogos expertos que cogerán muestras del terreno con una sonda mecanizada para posteriormente llevarlas a estudio.

El laboratorio será quien examine dichas pruebas para determinar de manera clara las características del terreno al cual nos enfrentamos y una vez tenemos este informe en nuestras manos pasamos a realizar la tomografía.

La tomografía es la prueba clave y final que nos hará llegar la información más precisa del estado del terreno a estudiar. Se colocarán electrodos alrededor del bloque y lanzaremos señales eléctricas, las cuales, en función de la resistividad que encuentren, nos chivarán donde el terreno presenta cavidades a rellenar o reforzar.